Para un ser insensible

Quizás hoy, te estés preguntando por qué?, quizás te preguntes que es lo que estas pagando, por que estar sufriendo tanto … porque lloras tanto por ella si la amas, si le entregaste todo el amor que puedes entregar, si le diste todo solo por verla feliz…estas ahí triste bajo la luz de la luna con tu copa medio vacía y solo le haces esas preguntas a Dios, dudando de Su existencia por quitarte lo que una vez creíste que jamás ibas perder… duele pensarlo y mientras más lo piensas, más ganas tienes de estar con ella otra vez.

Ahora querido, yo te digo a ti…Es que acaso no te diste cuenta de los detalles que pasaste por alto cuando estabas junto a ella? Es que acaso creíste que toda la vida ella iba a vivir solo por ti, sin tu ni siquiera hacer el mas mínimo esfuerzo por enamorarla cada día, sin tu demostrarle ni siquiera tu amor, o creíste que ella era capaz de además de vivir por ti, leer tus pensamientos… no seas tan insensible, mientras tu buscabas cada día una excusa mas para gritarle, ella no ignoró a quien lleno de cálidas palabras sus oídos, ella no tenía la más mínima intención de hacerte daño solo quería hacerte feliz y tú, con tu arrogancia, con tu egoísmo y con tus enfados ibas perdiendo poco a poco su corazón.

No entiendo porque se creen tan invencibles esos hombres que alardean en darle todo a una mujer, pero que en realidad la hacen sufrir, y no se dan cuenta, porque son tan orgullosos aparentando que son los mejores y que todo lo que ellos hacen esta bien, se olvidan de hacernos reír. Se les olvida que somos seres independientes y que no viviremos bajo la sombra de un amor perdido, sufriendo toda vida, se les olvida que nos amamos a nosotras mismas antes que nada. Que pase lo que pase seguiremos avanzando y luchando por nuestra felicidad.  

No creas que no me duele verte hoy ahí sufriendo por lo que perdiste, si lo siento, lo que sucede es que ya moví las piezas, ahora el viento sopla a mi favor y tomaré esta oportunidad, tu mientras tanto quédate con tu ego barato que solo acompañará tu soledad. Y mientras te sirva la experiencia, no te olvides de mí. Seré la mala de esta historia quizás, pero el papel que me toca por lo menos no morirá de tristeza y tendrá un feliz final.

Lizbeth Hernández