Volando con mis propias alas...
Y de repente te das cuenta que has vivido todo lo que querías
vivir, que emprendiste tu vuelo por primera vez, te permitiste realizar la
aventura que tanto deseaste. Estrenaste tus alas y conociste el mundo,
conociste personas maravillosas que hicieron que tu vuelo sea espectacular.
Reíste, lloraste, admiraste otros pájaros, seguiste el vuelo de otras aves y también
descubriste tu propio destino.
Con las caídas aprendiste a ser más fuerte
y a tener más fe en las cosas, fuiste
valiente, ningún obstáculo era obstáculo si no un reto más que desafiar.
Viviste en el mundo, conociste el mundo, desde aquellos ángeles que te enseñan
donde realmente reside la felicidad, hasta aquellos envidiosos que solo quieren
verte caer y hacen lo que sea por cortar tus alas.
’’ No es fácil el camino’’,
te dijo tu madre cuando decidiste iniciar el vuelo tú solo, no hiciste caso,
pues tenías curiosidad sobre el mundo y querías descubrirlo por ti mismo.
Viviste en la miseria, sin alimento; viviste con frio sin ninguna protección; pero no te desanimaste nunca, aunque sabias
que podías solo, no estaba demás apoyarte en esos ángeles que te cuidarían y protegerían…
el tiempo pasa y te das cuenta que tu aventura está finalizando que todos los pájaros
ya tienen su nido y que tú, sigues ahí intentando descubrir que es lo que te
llena, que es lo que te da vida, cual es el sentido de vivir … sigues rodeando
bosques, pantanos y valles y sigues admirando la naturaleza divina y te das
cuenta que estas solo … que a pesar de tus amigos y tu familia… estas solo, que
aquellos con los que una vez pudiste contar se fueron y de ellos solo quedan
recuerdos… conociste el mundo y no te pareció adecuado para ti, sin embargo
valió la pena todo el recorrido. Hoy te despides de tus alas y decides
aterrizar, pensando que experimentando tierra firme encontraras tu verdadera
pasión, tu verdadero camino.
Lizbeth Hernandez
Comments
Post a Comment